¿Por qué salen manchas en la cara por el sol?
Estás frente al espejo y notas cambios de color en ciertas zonas de la piel del rostro, como puntitos pequeños o manchas lisas de color marrón. Estas manchas en la mayoría de las ocasiones están producidas por la exposición de nuestra piel al sol y por el envejecimiento. Si bien las manchas en la cara por el sol no suelen suponer un riesgo grave para la salud, debemos llevar un correcto cuidado de la piel para protegerla frente a agentes externos .
El sol es una fuente de vitamina D; nos ayuda a regular nuestro reloj interno, mejora nuestro sistema inmune y el estado de ánimo, entre otros múltiples beneficios. Pero no debemos exponer nuestra piel al sol a ciertas horas del día y mucho menos sin protección, ya es uno de los factores que inciden en la aparición de afecciones de la piel, como sarpullidos, erupciones cutáneas y, en última instancia, cáncer1.
Cuando tomamos sol sin protección y excesivamente, este deja huella en nuestra piel, provocando la aparición de manchas por hiperpigmentación a medida que envejecemos. Es importante mantener un buen cuidado de la piel antes y después de tomar el sol para ayudar a regenerar la piel y mantener la barrera cutánea que nos protege de factores externos.
Veamos detenidamente cómo aparecen las manchas en la cara por el sol.
¿Qué son las manchas en la piel y qué las causa?
Las manchas en la piel son en realidad zonas donde se ha producido una hiperpigmentación por acumulación de melanina, una sustancia natural que le proporciona color a nuestro cabello, piel e iris del ojo y es producida por melanocitos de la piel. Además de proporcionar color a la piel nos protege del sol. Esta acumulación de melanina se produce como una respuesta del organismo ante situaciones perjudiciales para nuestras células. Ante un exceso de exposición al sol, nuestro organismo trata de proteger las células de posibles daños y aumenta la producción de melanina. Es entonces cuando aparecen las manchas en la cara por el sol.
Además de estas manchas en la cara causadas por el sol, existen otros factores de riesgo que pueden originar estas hiperpigmentaciones.
- Factores genéticos: el vitíligo, por ejemplo, puede causar manchas de color blanco.
- Hormonales: el melasma es un tipo de mancha en forma de parches y está asociada a menudo con hormonas como el estrógeno y la progesterona.
- Medicación: existen fármacos que pueden reaccionar al sol derivando en manchas en la piel. Entre estos medicamentos se encuentran los antiinflamatorios, los antihistamínicos y corticoides, los antidepresivos, los anticonceptivos y los antibióticos.
- Enfermedades: como el cáncer o algunas infecciones.
Tipos de manchas en la piel:
Además de las manchas en la cara por el sol, existen diferentes tipos de manchas en la piel relacionadas con diferentes causas como las mencionadas anteriormente. Entre las más frecuentes se encuentran:
- Manchas pigmentarias: las ya mencionadas manchas en la cara por el sol. Son placas pequeñas y oscuras, cuya causa principal es la exposición solar. Aparecen en cara, brazos y manos, ya que son las zonas que suelen sufrir más daños en la piel por el sol al estar más expuestas.
- Melasma o cloasma2: zonas oscuras e irregulares en cara o brazos. Afecta al 90% de las mujeres embarazadas debido a las hormonas, así como a aquellas personas que tomen píldoras anticonceptivas.
- Hiperpigmentación inflamatoria: : cuando se produce una lesión en la piel y se cura, esta lesión permanece en forma de mancha lisa con color. Común en personas que han sufrido acné y como consecuencia de algunos procedimientos cosméticos.
Si bien existen condiciones genéticas que pueden favorecer la aparición de manchas en la piel, la exposición solar es uno de los factores más comunes y ante ella sí podemos tomar medidas que ayuden al cuidado de la piel.
Cuidados de la piel para tomar el sol:
Para cuidar nuestra piel y evitar manchas en la cara por el sol debemos mantenerla protegida contra la radiación solar. El sol es necesario y tiene múltiples beneficios, pero cuando nos exponemos a él debemos hacerlo con precaución para evitar afecciones de la piel, como sarpullidos o brotes de dermatitis, manchas y problemas más serios como el riesgo de cáncer de piel.
- Usa protección solar: Es importante utilizar protección solar que filtre tanto los rayos UVA como los UVB y tengan un SPF de 15 como mínimo. Debemos aplicar una capa gruesa en todas las zonas que vayan a ser expuestas y se debe repetir la aplicación cada dos horas o con mayor frecuencia si sudamos o si estamos en contacto con el agua para evitar daños en la piel por sol.
- Buscar zonas de sombra: El sol debe evitarse en las horas de mayor índice de rayos UV, es decir, entre las 12:00 y las 16:00.
- Usa ropa que proteja tu piel de tejido ajustado o cerrado. También puede ser de ayuda usar sombreros tupidos de ala ancha que nos cubra la cara, orejas y el cuello.
Es fundamental cuidar nuestra piel y nuestra barrera cutánea en todo momento para que esta no se debilite y evitar así posibles afecciones de la piel causadas por factores externos. Si no has tomado las precauciones necesarias, existen formas de tratar una quemadura solar:
- Puedes tomar un analgésico que te ayude a aliviar el dolor y el escozor de la quemadura.
- Refresca tu piel: con un trapo o toalla puedes aplicar agua fresca a toquecitos. También es recomendable tomar un baño de agua fresca con bicarbonato de sodio, aproximadamente 60 gramos por baño.
- Bebe agua: esto te ayudará contra la deshidratación.
- Aplicar crema hidratante regeneradora: las cremas con pantenol ayudan a calmar las molestias al mismo tiempo que contribuyen a la regeneración de las células de tu piel. Tal es el caso de Bepanthol® pomada regeneradora facial su fórmula aporta alivio inmediato, ayuda a la regeneración y fortalece la barrera cutánea. Y para el cuidado de la piel del resto del cuerpo Bepanthol® Crema es una opción perfecta para las irritaciones leves por exposición excesiva al sol gracias a su textura ligera y de rápida absorción.
Mantener nuestra piel saludable, hidratada y fuera del alcance de daños por el sol está totalmente en nuestras manos con una simple rutina de cuidados de piel diarios que incluyan cremas hidratantes, dieta equilibrada, beber agua y por supuesto cremas con protección solar. Luce una piel sana y perfecta junto a Bepanthol®.
Referencias